Es curioso lo obsesionado que puede estar el mundo con la belleza, ¿no? Recuerdo una vez en la que a un amigo mío, Samuel, que era tan guapo como largo el día, lo echaron literalmente de una fiesta simplemente porque todas las chicas hablaban de él.
Se suponía que sería una velada para celebrar el cumpleaños de nuestro amigo Pierre, pero la estrella de la velada fue Samuel. A Pedro no le gustó. En definitiva, este tipo de anécdotas siempre me han hecho pensar en el impacto que tiene la apariencia física en la vida de las personas.
Entonces, hablando de que la belleza causa problemas, ¿conoces la historia de Omar Borkan Al Gala? Este chico, un modelo nacido en Irak, fue deportado de Arabia Saudita en 2013, supuestamente porque era demasiado guapo.
Sí, has leído bien, ¡qué bonito! Cuando escuché eso, me pregunté cómo se pudo llegar a esto. Pero cuando profundizamos un poco más, descubrimos que el problema no era sólo su rostro angelical.
Para darle un poco de contexto, Omar Borkan se convirtió en una sensación mundial después de este incidente.
Tiene unos ojos que parecen traspasarte el alma y un rostro tan perfecto que podría eclipsar a cualquier actor de Hollywood.
En ese momento, los medios informaron que su belleza llamó la atención de todas las mujeres del país, y que esto representaba una amenaza a las buenas costumbres. ¡Imagínate ser tan guapo que te expulsen del país!
Pero, por supuesto, las autoridades saudíes se apresuraron a rectificar la situación diciendo que el problema no era realmente su apariencia, sino su comportamiento.
Aparentemente, a Omar le gustaba publicar videos de él mismo bailando en las redes sociales, videos que realmente no encajaban con las tradiciones y valores locales. Bueno, esa es una buena manera de pasar la píldora.
Después de verse obligado a abandonar Arabia Saudita, Omar se mudó a Dubai, donde su carrera realmente despegó.
Ha sido invitado a programas de televisión, entrevistado por prestigiosas revistas e incluso fue clasificado entre los hombres más guapos del mundo por “Best Toppers” en 2021.
¿Te das cuenta? Este chico que fue condenado al ostracismo por su buena apariencia se convirtió en una superestrella mundial. Se ha diversificado, incursionando en todo, desde modelaje hasta alojamiento de YouTube y fotografía.
Una vida personal turbulenta
En lo que respecta a su vida personal, Omar también ha tenido sus altibajos. Se casó con Yasmin Oweidah, una diseñadora multimillonaria, en 2015.
Desafortunadamente, su matrimonio no duró y se divorciaron en 2018. De esta unión nació un hijo, Diyab, que se convirtió en la luz de la vida de Omar. Los fanáticos dicen que heredó la buena apariencia de su padre y, sinceramente, ¡no me sorprendería!
Omar hoy: Un encanto atemporal
Aunque ha pasado una década desde que el mundo escuchó por primera vez hablar de Omar, sigue siendo un hombre increíblemente atractivo. ¡Y sus admiradores no dejan de recordárselo! A sus 33 años, sigue llamando la atención y recibiendo mensajes como “Estás aún más guapo que antes” o “Como el buen vino, con el tiempo mejoras”.